Yo, vieja

NUESTRA LECTURA RECOMENDADA PARA EL MES DE OCTUBRE: “Yo, vieja” de Anna Freixas

Desde La Revolución de las Emociones, reivindicamos que ha llegado el momento de ponerse las “gafas grises” para iniciar el proceso de toma de conciencia del edadismo reinante en nuestras sociedades, en nuestra propia forma de pensar en torno a la edad. El edadismo, no es otra cosa que los prejuicios en torno a la edad, prejuicios que nos limitan como personas. Al igual que el machismo, el pensamiento edadista está enraizado en nuestra forma de pensar y socializarnos. La propuesta de Anna Freixas (Barcelona, 1964), se convierte en el antídoto perfecto para combatir este tipo de mentalidad limitante y excluyente, fruto de una sociedad marcada por el machismo, el catolicismo y un capitalismo exacerbado que rinde culto a la juventud.

Su obra, “Yo, vieja” (Capitán Swing) presenta un recorrido por los derechos humanos en la vejez, y concretamente por los derechos de las mujeres, sintetizados en tres principios: libertad, justicia y dignidad. Presentado como apuntes de supervivencia están pensados para la nueva generación de viejas que van estrenando libertades. Este libro pretende ser una reflexión y un divertimento sobre un surtido de pequeñas cosas que en este momento de la vida nos la pueden amargar o, por el contrario, hacérnosla más fácil. Una especie de foco para iluminar situaciones de la vida cotidiana que creemos tan normales que no las consideramos importantes y que, sin embargo, constituyen el grueso de la discriminación y el rechazo social hacia las personas mayores, únicamente por el hecho de serlo. Freixas también trata de visibilizar determinados factores que consolidan los estereotipos que la sociedad tiene sobre las veteranas. Yo, vieja es un canto a la libertad y al desparpajo; a la vejez confortable y afirmativa. En su obra analiza temas como el de la sexualidad de las mujeres mayores y propone cuestiones como la de cobrar por el cuidado de los nietos, «Las mujeres hemos regalado nuestro tiempo como si nos sobrara» explica la autora al respecto.  Con la pretensión de que entre todas consigamos vivir una edad mayor elegante, relajada y firme.

Con prólogo de Manuela Carmena, la exalcaldesa inicia así su reflexión:

“Me he leído el libro de tirón. Gracias, gracias, Anna. Me ha hecho mucha gracia el catálogo de consejos que nos das a las mujeres mayores. Y esto, en sí mismo, resulta algo relevante. Quizás no suficientemente reconocido, lo cierto es que las mujeres hemos tenido que pelear también, entre otras muchas cosas, por que se nos conociera como tales. Pelear por que se conociera, y conociéramos, nuestra propia biología, con lo que tiene de grandioso, diferente y singular”.